A menudo los monumentos más antiguos de una villa, por muy pequeños y poco espectaculares que sean, dicen tanto de ella, de su pasado, de sus raíces, como cualquier gran monumento. El Sepulcro Romano de Lloret de Mar es uno de esos humildes recuerdos que nos indican que, en una época en que Lloret era muy distinta a la actual, fue habitada por unos habitantes también muy diferentes a nosotros.
Este sepulcro romano no fue descubierto realmente durante un proceso de excavación. Fue a finales del siglo XIX cuando las autoridades parroquiales decidieron comunicar al estudioso Joaquím Botet i Sisó que, en la ubicación donde se encuentra, existían desde muy antiguo “restos que se suponían de alguna antigua capilla ó iglesia”.
El estudioso se dirigió hacia las ruinas indicadas y, tras una somera exploración, cuál fue su sorpresa al comprobar que en realidad no se trataba de ningún edificio cristiano, sino de un verdadero sepulcro romano, en concreto una torre funeraria, muy similar a la de los Escipiones en Tarragona u otra encontrada en Vilablareix.
Tras algunas excavaciones practicadas alrededor de él, Botet concluyó que el sepulcro, de una altura de 4,15 metros, era original del siglo II d.C. Su forma era más ancha en la parte baja y más esbelta a medida que se elevaba, hasta ser completado por una terraza con una baranda. No se ha podido determinar el personaje al cual estaba dedicado, sin lugar a dudas de renombre dentro de la administración local, del cual se encontraron las cenizas en una urna situada en la base del monumento funerario.
Hemos de pensar que la zona en la que se encuentra corresponde a un antiguo cementerio romano que fué utilizado entre los siglos I a.C. y III d.C., por lo que la ubicación de la torre aquí no es ni mucho menos casual. Por cierto, en 1968 sufrió una brutal agresión al ser derribado, suponemos que por motivos urbanísticos… sin embargo fue reconstruido con los mismos materiales originales para que podamos disfrutarlo tal y como era.
El Sepulcro Romano de Lloret de Mar es, junto con el poblado ibérico de Puig Castellet, el monumento antiguo más importante de la localidad. Se encuentra a unos 2 km del centro y es posible llegar a él con la línea 4 del bus.
- Sépulcre Romain de Lloret de Mar(VERSION FRANÇAISE)