El pasado verano vino mi hermana a visitarme a la Costa Brava y me preguntó por algún lugar natural que estuviese segura que gustase a los niños. No lo dudé ni un instante: nos fuimos todos en familia a pasar la mañana al Butterfly Park Empuriabrava, en Castelló d’Empúries, y no demasiado lejos de los Aiguamolls de l’Empordà.

Butterfly Park Empuriabrava, en Castelló d'Empúries, Girona, Costa Brava

Yo hacía tiempo que había estado en este invernadero y no perdí la ocasión de volver a visitarlo. Es un jardín tropical recreado en un invernadero cubierto de unos 1000 m2. Y he de decir que lo que allí descubres es maravilloso: mariposas de múltiples colores que no habrás visto en tu vida, loros, cotorras, iguanas, periquitos, alejandrinas, tortugas… toda una fauna foránea que aquí, a unos 28ºC de temperatura y un 80% de humedad, se encuentra como en casa.

Escenitas como estas, en que estos dos pajaritos se besan y se limpian mutuamente, no son raras de ver en el Butterfly Park Empuriabrava

Nada más entrar notamos ese cambio de temperatura. Desde luego, esto es lo más parecido a una selva que te puedas encontrar… pero sin peligros! Mis sobrinos sintieron una irresistible atracción por los reptiles, en concreto por las iguanas, y a mí, aparte de las mariposas, me encantan los pajaritos, sobre todo las escenas de besitos, o cuando se limpian entre ellos. Esas escenas son de una gran ternura. El parque contiene muchas indicaciones y una exposición de mariposas. Aprendimos bastante de su ciclo de desarrollo, y yo por ejemplo de me quedé muy sorprendida de saber que las mariposas tienen el sentido del gusto en sus patitas.

Resulta que las mariposas tienen el sentido del gusto en sus patitas!

El recinto contiene estanques y cascadas de agua, elementos que ayudan a mantener la humedad del entorno. Se puede comprar comida en el propio parque y dar de comer a los pajaritos, que acuden gustosos a tu mano, ya que están acostumbrados a ello. Por experiencia propia os puedo decir que ningún padre o madre se resiste a hacer una foto de su hijo dando de comer a uno de estos pajaritos.

Los niños son los primeros sorprendidos de ver a animalitos de los que a menudo sólo tienen conocimiento por los libros o la TV

El Butterfly Park Empuriabrava se encuentra abierto de abril hasta primeros de noviembre. Se recomienda acudir en días soleados, cuando las mariposas tienen una mayor actividad. Aquí se aparca sin problemas y además está completamente adaptado a personas con sillas de ruedas, por lo que se trata de una actividad apta para toda la familia.

Los reptiles del Butterfly Park Empuriabrava comen insectos y hormigas, algo que contribuye indirectamente al crecimiento de las plantas y al equilibrio del medio

Si no has estado nunca en plena selva, en un safari, esto es de lo más parecido que vas a encontrar… y está aquí, en la Costa Brava!

Las formas y colores de las mariposas del Butterfly Park Empuriabrava son realmente curiosos, y difíciles de ver fuera de este ámbito