El Claustro Románico de Palamós se encuentra en la histórica finca Mas del Vent, a medio camino entre la carretera C-31 y la Playa de la Fosca. Instalado aquí desde 1959, en los últimos años ha sido objetivo de redescubrimiento y controversia sobre su auténtica datación y origen.

El Claustro Románico de Palamós se encuentra en una propiedad privada cerca la Playa Fosca, y todavía hoy es un misterio no del todo aclarado el origen medieval de sus piedras
De este precioso claustro románico sabemos con total certeza cómo llegó hasta aquí. Fue colocado en 1959 tras una compra realizada en Madrid por los familiares de los actuales dueños de la finca, la familia alemana de los Engelhorn. Su precio: un millón de las antiguas pesetas.

El Claustro Románico de Palamós fue construído en este emplazamiento en 1959, a partir de un conjunto de piedras procedentes de un coleccionista de arte madrileño que se almacenaban en Madrid
Así permaneció diversas décadas de manera discreta hasta que en el año 2010 un profesor de Historia de Arte Medieval de la Universidad de Girona, Gerardo Boto, a raíz de las fotografías de alta resolución aparecidas en una revista de decoración francesa de la casa, alertó sobre el posible valor histórico de este claustro, calificado por él ‘como el más grande hallazgo de los últimos años en arte románico’.

El Claustro de Palamós conserva piezas que son de innegable origen medieval, como la base de este capitel
En el año 2012 se lleva a cabo el primer estudio del claustro impulsado por técnicos del Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya. De él se desprende que la mayor parte del claustro fue creado como réplica medieval durante los siglos XIX o XX, aunque se observaron determinadas piezas de origen medieval, y por tanto de mayor valor histórico. Esta conclusión, sin embargo, no ha evitado que se sigan lanzando hipótesis sobre el posible origen de los restos medievales del claustro. Una de las más fundamentadas (corroborada por estudios mineralógicos) es la del propio profesor Boto, quien cree que los restos pertenecen al antiguo claustro románico de la Catedral Vieja de Salamanca, que en 1783 fue desmantelada tras los graves daños sufridos unos pocos años antes por el gran terremoto de Lisboa de 1755.

No deja de ser sorprendente contemplar una joya histórica como el Claustro Románico de Palamós, hipotéticamente procedente de Salamanca, Castilla-León, junto a una moderna piscina privada de la Costa Brava
Sea como fuere el Claustro Románico del Mas Vent de Palamós ya ha sido declarado Bien de Interés Cultural por la Generalitat. Esto le confiere un estatus de protección y de exposición al público, quien ya puede visitarlo, por lo menos una vez al mes, en visitas guiadas organizadas desde el Museo de la Pesca de la localidad. El Mas Vent, la finca donde se encuentra el claustro, tiene ya de por sí un gran valor histórico por ser una antigua masía catalana fortificada del siglo XVI, aunque muy restaurada a lo largo de los siglos. Se conserva bien su torre de defensa, antiguo refugio de los moradores contra los ataques piratas que llegaban por mar, y sobre el dintel de la puerta una inscripción en piedra muestra la fecha de construcción: 1585.
Cloître Roman de Palamós(VERSION FRANÇAISE)




