La Cova de s’Infern (Cueva del Infierno) es el arcaico nombre que recibe uno de los accidentes geográficos más fascinantes del Cap de Creus, la última extremidad con la que los Pirineos entra en el Mediterráneo.
Al parecer, el peculiar nombre que recibe esta cueva marina se debe al color amarillento y rojizo que se observa en el fondo de sus aguas cuando sale sol, y que evoca a la puerta del infierno.
Más allá de la leyenda, lo cierto es que la visita a este punto del Cabo de Creus, situado en su parte más oriental, se convertirá en una gran experiencia para el caminante y el bañista. Para llegar a él podemos partir a pie desde el faro del Cabo de Creus y recorrer durante unos 10 minutos el sendero que nos llevará a esta maravilla natural.
La Cova de s’Infern es un fenómeno causado por la erosión controlada provocada por el agua. En muchos casos estamos acostumbrados a ver cómo la fuerza del agua logra romper la roca y formar entrantes de agua. Sin embargo, en este caso, la roca ha llevado a cabo un movimiento dúctil de deformación, de manera que no se ha roto completamente, sino que ha amoldado la forma, mediante un orificio y techo, que permite el paso del agua. Realmente extraordinario.
La gran parte de las personas que visitan el lugar, sobre todo en verano, no pueden evitar tomar un baño en sus limpísimas aguas, que forman parte del Parque Natural del Cap de Creus. Tal y como se puede observar en la imagen es posible atravesar la cueva mediante embarcación, sobre todo si tiene poco calado o bien es un kayak.
- Cova de s’Infern(VERSION FRANÇAISE)