Torre de Can Magí es una torre de defensa original del siglo XVI que se conserva en excelente estado. Además, las vistas sobre la Vila Vella de Tossa y las playas son excelentes, por lo que se trata de uno de los mejores miradores de todo el pueblo.

Vistas del centro de Tossa de Mar y de su playa desde la Torre Can Magí, Costa Brava

Esta torre de defensa se encuentra sobre la montaña del mismo nombre, a poco más de 50 metros sobre el nivel del mar. Dado que no hay grandes edificios ni ninguna otra montaña entre la torre y el centro del pueblo, que se encuentra a poco más de 500 metros, las vistas que se obtienen son excelentes, pudiéndose apreciar claramente las torres y murallas de la Vila Vella, la iglesia y la Playa Grande de Tossa.

La Torre Can Magí es antigua torre de defensa que se encuentra sobre la villa costera de Tossa de Mar

La torre, restaurada en 1997, fue construida en el siglo XVI con el permiso del rey Felipe II con el objetivo de defenderse de los entonces frecuentes ataques piratas que llegaban por mar, y que normalmente procedían de embarcaciones del norte de África o Turquía.

Conseguimos llegar hasta la Torre Can Magí en tan sólo 25 minutos a partir del centro de Tossa. Realmente no se encuentra lejos del pueblo.

Torres como éstas son frecuentes por todo el litoral de la Costa Brava y su estructura no es muy diferente del resto: suelen tener dos pisos, que se comunicaban con una escalera de madera que se podía retirar y aspilleras en los muros desde donde atacaban a quienes les asediaban.

Desde la cima donde se encuentra la Torre de Can Magí es posible ver incluso el Faro de Tossa de Mar.

Estas torres formaban una linea de defensa que se comunicaban mediante señales de humo o sonoras, de manera que cuando una de ellas detectaban la llegada de los piratas desde un punto de la costa, comenzaba a alertar al resto mediante humo o un cuerno del peligro.