Las montañas de las Gavarras es una zona boscosa con una extensión de 350 km2 que es considerada el pulmón verde de la Costa Brava. Los caminos que las atraviesan son muy frecuentados por los amantes de la naturaleza.
Las Gavarres es un espacio natural que comprende nada más y nada menos que 20 localidades del Ampurdán, algunas de ellas costeras. Hace 600 millones de años estas montañas se encontraban todavía sumergidas en el mar y fue en el Cuaternario cuando finalmente se asentó geológicamente el terreno tal y como hoy lo conocemos.
La zona es muy rica en atractivos naturales y arquitectónicos. La red de carreteras y caminos que la vertebra, aptos para la práctica del ciclismo, permite a los excursionistas disfrutar de las rieras, fuentes, megalitos, puentes históricos, miradores y ermitas que se encuentran en este espacio (como la de Santa Coloma de Fitor), y eso sin mencionar la rica fauna animal y vegetal que lo puebla, formada en parte por especies protegidas.
A pesar de que durante muchísimos siglos esta fue una zona habitada, que proveía los suficientes recursos naturales para poder vivir en ella, a lo largo del siglo XX ha sufrido una progresiva despoblación, de manera que en el año 2000 había censadas 940 personas en ella. Continúan en pie muchas antiguas masías, típicas granjas tradicionales catalanas, muchas de ellas deshabitadas.
Recorrer las Gavarres es ciertamente apasionante. Los caminos que la cruzan son numerosos, pero probablemente no haya una carretera más famosa que pase su interior como la conocida por “la Ganga”, un bello recorrido que, desde la Bisbal d’Empordà, llega hasta Calonge atravesando la colina de la Ganga. a escasos 200 metros sobre el nivel del mar. Es un precioso trayecto de unos 30 km aproximadamente que puede hacerse tanto en vehículo como en bicicleta.
El centro de información más conocido de las Gavarres se encuentra en Cassà de la Selva, en la casa rural Mas Vilallonga.
- Massif des Gavarres(VERSION FRANÇAISE)
Informar que Solius, poble ubicat al terme de Santa Cristina d’Aro, no es troba a les Gavarres, sinó a l’Ardenya